âA Gerardo Morales lo respeto, es un gran hombre, es un buen amigo, pero tampoco voy a seguir aceptando lo que él diga en términos polÃticosâ dijo en la radio Félix Pérez, intendente de Tilcara, y, desde siempre, autodeterminado dirigente radical, en un reportaje en que habló de los temas cotidianos del municipio quebradero, pero también de la crisis social y sus motivos.
-Se viene la interna nacional ¿cómo lo ves a AlfonsÃn?
-En realidad, desde mi punto de vista, a AlfonsÃn lo veo un dirigente capaz, decidido, buena persona, pero yo creo que no es su momento, le falta madurez, pienso que después de algunos años más de trabajo en todo el paÃs puede ser una de las grandes posibilidades de la UCR. Para mà es prematuro que vaya de candidato; cosechó mucho consenso con la muerte de Raúl AlfonsÃn, pero ése no es el tema.
-¿PreferirÃas a Cobos?
-No necesariamente; a la dirigencia radical -igual que a la de los demás partidos- le falta madurez y mayor sentido federal, pero de un federalismo en serio, que se vea traducido en los hechos.
-Cambiando de tema ¿cuántos empleados tiene hoy la Municipalidad de Tilcara?
- Hoy la municipalidad tiene 70 empleados en planta permanente, incluidos concejales, secretarios e intendente. Y tenemos 80 jornalizados, que gracias a Dios con colaboración de la provincia, que entendió, están todos blanqueados con sueldo como si fueran de planta permanente.
-¿Alcanza la gente que hay?
-No, tenemos 12.000 habitantes, tenemos que cubrir una jurisdicción de 150.000 hectáreas, tenemos que atender: Abramayo, Yaquispampa, Las Ãnimas, El Durazno, El Molulo, Monte Carmelo, Alonso, después Pocoyos, Alfarcito y todo lo que hace al camino a Punta Corral, Se limpian los caminos de herradura y realmente la cantidad de personal para un municipio como Tilcara es poca, porque hay 80 personas por cada empleado municipal más o menos, pero en una geografÃa que no es la de una gran ciudad ni de la llanura. Hay muchas distancias y con caminos complicados.
- En los partidos polÃticos, alguien levanta la cabeza y lo matan; alguien es buen funcionario, lo matan; es joven, no lo dejan crecer; al creativo, lo anulan. Cada vez la clase dirigente es más mediocre, más inculta y más competitiva, entonces se matan entre ellos aunque su partido pierda, ¿cómo imaginás que se puede salir de este estado de cosas?
-Todos estamos enfermos, la sociedad entera, y también la clase polÃtica; desde la familia estamos muy enfermos, porque recuerdo que mi madre nos acompañaba desde la mañana, cocinaba y esperaba a mi padre que viniera de trabajar, a la tarde a la escuela o irse trabajar juntos, era el contacto directo. Hoy los padres estamos alejados de nuestros hijos y desde la globalización, el consumismo lleva a los adolescentes y a los jóvenes a la desesperación. Los polÃticos quieren más, más y más, y la gente busca una esperanza en nosotros para que podamos contenerlos, y la verdad, es que a la mayorÃa de los dirigentes no les interesa la gente en sà misma. Fijate, muchas veces uno sale de la casa y divide las monedas por todos los bolsillos, alguien pide una moneda y se la das, eso no sirve. Yo creo que se tiene que hacer una polÃtica de estado más profunda, escuchar a la gente, departir, sacar una conclusión y trabajar juntos. Escucho a veces discursos como âyo te regalé la viviendaâ, mentira, la vivienda salió del estado, que uno haya hecho una gestión, que haya tenido la visión para que ese vecino la tenga, en buena hora, pero no es que uno la regaló. Mirá lo que pasa con los docentes, paro tras paro, la educación les interesa tres cominos, esa criatura que se están educando no les importa, más allá de sus derechos, podrÃan reclamar sin perjudicar a los chicos; al docente conciente, le cortan las patas, y en la polÃtica pasa lo mismo. Es una crisis muy dura la que vive la sociedad argentina.
-¿Estás con Gerardo Morales o en contra?
-Lo respeto, es un gran hombre, es un buen amigo, pero tampoco voy a seguir aceptando lo que él diga en términos polÃticos. Creo que tenemos que darnos cuenta que en la polÃtica debemos hacer un capital social que quede en la historia, asà fueron nuestros próceres, nuestros maestros, los fundadores de la UCR. Al Churqui Choquevilca, a Medardo Pantoja no les interesaba la plata, les interesaban sus poemas y sus cuadros; pero tampoco a Horacio Guzmán, a Carlos Snopek, al mismo Raúl
AlfonsÃn, les apetecÃa lo material, si cuando te morÃs no te llevás nada. Y si dejás una herencia, tus hijos se matan para ver quién se queda con más. Hay que darles educación, que sean profesionales, que tengan conocimientos, y que después hagan su vida. Yo creo que debemos retroceder en la polÃtica, volver a los valores que habÃa antes, y que los polÃticos sean mejores y recuperen credibilidad.
|