Gladys Sivila, directora de Educación de la Muncicipalidad de San Salvador de Jujuy y Adriana Dorman, coordinadora del Instituto de Capacitación Intra e Inter Municipal, hablaron en la radio acerca del programa municipal de alfabetización que llevan adelante.
-¿Cómo es el proyecto de alfabetización con el que están trabajando?
-Sivila: Tengo una experiencia muy rica de trabajo con el tema de alfabetización, desde la Fundación Juanita Moro, venimos trabajando desde hace cuatro años con un programa muy especial que se llama Yo sí puedo, cubano. Hoy este mismo programa logramos tenerlo y proyectarlo con la Municipalidad para declarar libre de analfabetismo el municipio de san Salvador de Jujuy.
-Dorman: Desde educación esto es lo más importante que podemos hacer, porque la alfabetización es lo que nos lleva al desarrollo social, humano, no solamente es tener el conocimiento del abecedario para la lecto-escritura, sino esencialmente el poder brindar a los adultos y adultos mayores, la posibilidad de reconozcan su situación, su realidad, para que puedan transformarla.
-Cuando empezaron con la Fundación Juanita Moro, me acuerdo de la respuesta de la gente, de los avances. Y también que había gente que sabía leer un poco y no se daba cuenta.
-Son los analfabetos funcionales, que han aprendido la lecto-escritura, pero sin la práctica constante se han olvidado; fueron perdiendo ese conocimiento. Lo retoman una vez que se les presta el apoyo necesario. Esta fue una experiencia muy, muy grata y muy importante la que vivimos con el Yo sí puedo en toda la provincia. Estamos hablando hasta ahora de 7000 alfabetizados con este programa.
-Siendo la ciudad muy grande ya, ¿cómo es el mecanismo para detectar a la gente?
-En principio es lo que hicimos siempre, es un proceso que comienza con la detección de los analfabetos a través de un relevamiento. La ciudad es muy extensa y también hay localidades que pertenecen al municipio, como Reyes, Ocloyas, etc. Y tenemos que llegar a cada uno de los barrios. Tomamos el barrio Alto Comedero, el comienzo, por ser el más populoso. De acuerdo a los últimos datos del INDEC, del Censo hecho hace diez años, ese barrio es el que mayor cantidad de analfabetos tenía. Estamos trabajando con una base de 600 personas allí, puede ser más o menos, todavía estamos haciendo el relevamiento para la detección de cada caso. En 15 días de trabajo, hemos encontrado 50 analfabetos puros en dos sectores del barrio, en los sectores B1 y B2; son mayores y adultos mayores. Hay otro grupo de gente, que debido a la obligatoriedad de la educación, si bien dejaron de ir a la escuela, tiene conocimientos de la lecto-escritura y su aplicación.
-Dorman: Es raro encontrar analfabetos puros. Hay que decir que es muy importante que desde la política del municipio se esté tratando esta problemática, si queremos un municipio saludable, que pueda progresar. La formación y la posibilidad de comunicación es fundamental, porque no sólo se enseña a leer y escribir, se capacita a la gente para la vida, la participación ciudadana, para producir e insertarse de la sociedad. El que sabe leer y escribir muchas veces no valora lo fundamental que es para la inserción social, para que no sean excluidos.
-Sivila: Algunos conocen las letras, pero es necesario que puedan aprender a unirlas para leer y formar palabras, sílabas. Una vez que fijan las letras, unidas en sílabas, y las sílabas entre sí, logran formar palabras, que luego las van asociando con hechos de la vida real, en forma concreta, por ejemplo, los nombres de los hijos, los nietas, de las cosas que comprar en el almacén. Al hacer esa asociación van fijando las letras en palabras, de manera que eso les ayuda a practicar.
-Todo lo que tiene que ver con la educación pública, con la escuela está muy cambiado. Se ve gente que está en 1º o 2º año del secundario que no sabe leer. O que leen deletreando. ¿Cómo ven esto?
-Dorman: El niño desde las primeras edades va adquiriendo el proceso de alfabetización. Y muchas veces, con las distintas posturas, teorías, etc., esa adquisición varía. Una cosa es pensar que es un proceso mecánico, y otra es darle significado. Se ha visto como no se han respetado las etapas, los momentos de maduración, ni el niño ha ido desarrollando las herramientas y a medida que va creciendo va generando lagunas en su proceso de conocimiento, y en vez de ir avanzando en la herramienta de comunicación, se convierte en una etapa o un requisito a superar del sistema escolar, y no algo necesario para la vida cotidiana; se percibe como escindido de su realidad. Aparte, en la alfabetización de los procesos tecnológicos, el chico ha perdido el manejo cotidiano de la lectura con otros dispositivos, como los libros: sabe chatear, pero no sabe escribir. No se fija que necesita adquirir un código, saber exactamente cómo se escribe una palabra para comunicarse. La utiliza como herramienta sin darle la importancia que tiene.
-Un oyente pregunta cómo articular e integrar el trabajo que hacen las organizaciones sociales en alfabetización y terminalidad de primaria, con lo que hace el municipio.
-Sivila: Hay una diferencia entre el programa Yo sí puedo, con el programa de Nación y Provincia, porque el objetivo de Yo sí puedo es que la gente pueda leer y escribir en corto plazo, a través de metodologías especiales, con soportes audiovisuales. De manera tal que se les da las herramientas para que después puedan retomar la educación formal, por ejemplo, o donde se sientan contenidos. Se respetan siempre los tiempos de cada uno.